domingo, 1 de mayo de 2011

Con defectos y manías.

Lo admito. No se me dan bien los deportes de raqueta. Me tiembla muchísimo el pulso. No sé perder, y me tengo que contener para no chinchar al que ha perdido cuando gano. Admito que tengo las manos frías, y que a veces me bloqueo cuando hablo muy deprisa. Tengo la manía de poner los codos en la mesa, aunque sé perfectamente que es de mala educación. A veces hablo tanto que puedo llegar a resultar un poco cargante. Soy un poco bocazas con los secretos que no son importantes, con las tonterías, pero cuando tengo que guardar un secreto importante, sé hacerlo. Estudio dos días antes del examen, aún habiendo tenido mucho tiempo para hacerlo antes. Soy extremadamente despistada, Soy impaciente, cabezota y a veces un poco insolente, pero mi mayor defecto es, sin duda alguna, que te quiero.